domingo, 28 de junio de 2015

GRUPOS DE TAREAS DISFRAZADOS



Aparición de formaciones asimilables a los grupos de tareas: Es en películas de apariencia inocente donde pueden vislumbrarse algunas características iniciales de los llamados “grupos de tareas” En “Cantaniño cuenta un cuento”(Mario David, 1979) y en “Bárbara”(Gino Landi, 1980), aparecen grupos similares: tres o cuatro hombres según el caso, vestidos de gris o negro, persiguen a los protagonistas, brindando una sensación de territorio bajo continuo estado de vigilancia. En la primera, sus acciones se limitan a pequeños sabotajes para tratar de impedir la exhibición de lo que el grupo filma; aún en esas circunstancias que podrían aludir elípticamente a la censura, llama poderosamente la atención la movilidad de esos personajes –cuyo origen y relaciones con el poder se desconocen- a lo largo de todo el país, como si se tratara de un espacio liberado para sus acciones. En la segunda, si bien el grupo exhibe ciertos niveles de torpeza, finalmente pasan a la acción secuestrando a la protagonista con metodologías que parecen tomadas de los grupos paramilitares: utilización de objetos que ocultan su verdadera identidad, vehículos fácilmente relacionables con el accionar policial/militar –aquí se trata de un Ford Farlaine verde- y uso de elementos que corten toda posibilidad de movimiento y expresión del secuestrado –mordazas, ataduras-.


El peligro está en los vivos, pag. 55-56.

ALGUNAS FRASES OÍDAS EN EL CINE DE LA ÉPOCA XII



”A los muertos no hay que tenerles miedo. Los vivos son los que traen problemas”(Norberto)(Los muchachos de antes no usaban arsénico-José Antonio Martinez Suarez,1976)

”La vida, la muerte, todo depende de quien maneja los elementos”(Norberto) (Los muchachos de antes no usaban arsénico-José Antonio Martinez Suarez,1976)


”Solo soy un instrumento de un mundo que cambia”(Laura)(Los muchachos de antes no usaban arsénico-José Antonio Martinez Suarez,1976)

sábado, 27 de junio de 2015

BIBLIOGRAFÍA ADICIONAL XI



Artículo de Sergio Wolf sobre el cine del Proceso incluído en "Cine argentino. La otra historia" (Ediciones Letra Buena, 1994)





domingo, 14 de junio de 2015

ALGUNAS FRASES OÍDAS EN EL CINE DE LA ÉPOCA XI



”¿Cómo bolches?. Si siempre fui peronista”(Mateo Guastavino, a quien le exigen que renuncie a su puesto en la municipalidad de Colonia Vela)(No habrá más penas ni olvidos-Héctor Olivera,1983)

EL LIBRO EN LA BIBLIOTECA DE LA ENERC


Para quienes viven en Buenos Aires y no pueden comprar el libro, ahora lo pueden consultar en la Biblioteca de la ENERC, en calle Moreno esquina Salta. Y aprovechen, que es un lindo lugar y quienes se encargan de la biblioteca, con Adrián Muoyo a la cabeza, es gente que sabe y le gusta lo que hace. 

ENTREVISTA EN FM FEDERAL



Nuevamente, la entrevista que me hicieron en FM Federal hace unas semanas, gracias al amigo Fernando Carreiro.

lunes, 8 de junio de 2015

INGENUIDAD O ALEVOSÍA: CÓMO SE BANALIZAN LOS NN



                  Visto desde un lugar ingenuo, podría pensarse que no hay nada demasiado extraño en una película como “Los chicos crecen”(Enrique Carreras, 1976) en la que se trata de un hombre que se rehúsa a reconocer a los hijos que tuvo con su amante, a quienes les ha puesto otro apellido para cuidar su reputación social. Pero allí pueden intuirse ciertos elementos que ligan la práctica de los militares con los actos de Zapiola: si bien aquí no hay una apropiación –los hijos son el fruto de la relación de Zapiola con Cristina de acuerdo a lo que ambos manifiestan-, lo que sí existe es una supresión de la identidad real, prueba de que con los niños se puede hacer lo que se desee, incluso cambiar su filiación. Cazenave, el amigo de Zapiola, instancia moral del relato, sin embargo, complica definitivamente las cosas al preguntarle irónicamente a su amigo: “¿Y cómo les pusiste?¿NN?”. Un dato adicional a tener en cuenta: en el relato que la madre y Zapiola hacen a los niños, el padre es un convicto al que se le conceden solo salidas esporádicas. La familia se construye, entonces, a partir de una sucesión de premisas falsas: los chicos crecen, efectivamente, con la imagen de un padre que no lo es, que reemplaza a un padre real que nunca conocerán –en tanto Zapiola toma la decisión de seguir con su esposa y no con su amante-, y con una identidad, o al menos una parte de ella, fraguada.

El peligro está en los vivos, pp.40.

ALGUNAS FRASES OIDAS EN EL CINE DE LA ÈPOCA X



”Puede gritar lo que quiera. Con el ruido de los motores, nadie va a escuchar”(El asesino a sueldo)(Custodio de señoras-Hugo Sofovich,1979)